No lo sé

No lo sé,

Evidencias
más allá de toda duda razonable
no las hay.

La Razón no lo sabe todo,

Algo sabe
de la nada.

Por lo tanto, la nada algo es.

¿El alma? ¿Inmortal?
No, pero algo.

Debe ser.

Lo que es, es existiendo,

Como ha quedado demostrado en Spinoza,

Y en la geometría intelectual.

¿La existencia?, finita y limitada,

Siempre es, y es en cada caso.

La eternidad es el no-tiempo.

Y lo infinito no cabe en el espacio.

Pero tú (hija e hijo. míos),

Son eternamente e infinitos.

Y mi amor a ustedes

No podría ser nunca de otro modo.

No lo sé y no estaré aquí para siempre.

He de morir.

Ojalá antes… ojalá y bien.

Pero nunca desesperen
cuando falte y cuando falle,
aunque así no lo quisiera,

Supérense a sí mismos,
Despréndanse,
La perfección es una idea
y siempre está por realizarse.
Desde la insignificancia

Devengan lo que no hemos sido.

Sepan tan sólo
Que somos un suspiro y un accidente,

Pero así también el origen de todo significado.

Y ustedes significan todo para mí.

¿Qué quiero yo como hijo?: emular a mi madre y a mi padre.

He de ser afortunado,

¿Qué quiero yo como Padre?: querer ser hijo de mis hijos, como mis padres.

He de ser afortunado.

Los amo hijos míos.

Ni en mis sueños son tan hermosos
como de hecho son.

Y son hermosos cada día, eternos e infinitos.

Eternos e Infinitos.
Como son.